¿Sabes que puedes planificar tus objetivos empresariales en solo 4 pasos que te acercarán a conseguir lo que quieres?

Como ya he comentado otras veces, si quieres llegar a algún sitio lo primero que debes tener claro es a dónde vas.

Porque todo lo que vas a hacer este año con tu empresa, se parece a salir de viaje y volver con la satisfacción de haber visitado y conocido todo lo que te habías propuesto.

Esta es la imagen mental con la explico a mis clientes cómo deben enfrentarse a la idea de fijar unos objetivos de negocio y cómo trazar la hoja de ruta que les permitirá alcanzarlos:

• Fijar un destino, como si utilizaras un GPS. Solo de esta forma, serás capaz de trazar los itinerarios posibles y de valorar el tiempo y recursos que te exige cada camino.

• Definir las etapas intermedias, las paradas estratégicas que implica tu viaje. En definitiva, es tener claro cuáles son los principales hitos que debes cubrir.

• Comprometer tu calendario, para que el viaje no se convierta en algo difuso y abstracto. Debes  saber cuándo tienes que llegar a esas etapas intermedias para asegurar que tu aventura sigue el plan previsto.

• Conocer qué debes hacer para cubrir cada una de esas fases, programando las acciones concretas que hay que ejecutar y cerrar para que la Hoja de Ruta trazada se vaya convirtiendo en realidad.

ASÍ LO HAGO YO, PASO A PASO.

Bueno… yo lo hago un poquito más completo… pero te dejo la versión fácil para que no puedas ponerte ninguna excusa y no hacerlo.

Se trata de 4 pasos detallados con ejemplos concretos, donde te muestro el tipo de esquema visual con el que puedes proogramar toda tu actividad empresarial a corto plazo.

No se trata de una masterclass teórica ni de la revisión de sistemas de trabajo sobredimensionados a las necesidades de los profesionales y las pymes.

Es una demostración práctica y directa de cómo puedes programar los objetivos en tu empresa.

Hasta que definí este sistema sencillo, yo misma dejaba “los deberes por hacer” porque no veía clara la relación entre el tiempo que iba a necesitar y los beneficios que obtendría.

Pero ahora te aseguro que si no tienes tiempo para hacer lo que te propongo, entonces deberías identificar qué está pasando en tu negocio:

• ¿te falta foco empresarial para definir prioridades?
• ¿te estás poniendo objetivos inalcanzables en relación a los recursos que tienes?
• ¿te falta visión estratégica? ¿necesitas más formación táctica?

Vamos allá.

PLANIFICAR ES COMO SALIR DE VIAJE.

La gran pregunta no sólo es a dónde vas (destino) sino también cuántos días tienes (tiempo) y cuánto dinero tienes para eso (presupuesto).

Estos 3 elementos – objetivos, tiempo y dinero – condicionan de forma radical lo que vas a poder hacer (por ejemplo, qué recursos  puedes desplegar en función de tu presupuesto o incluso qué estrategias son más adecuadas en función del tiempo en el que esperas conseguir resultados).

Definir bien tus objetivos, es el primer paso para hacerlos posible.  

• “Este año voy a facturar más”
• “Este año voy a lanzar un nuevo producto”
• “Este año voy a publicar con más regularidad en el blog”

Aunque creas que este tipo de declaración es suficiente, siento decepcionarte:  no lo son.

Porque todo esto NO son objetivos. Como mucho son deseos, metas.

Un objetivo siempre debe poder expresarse de forma concreta y medible.

En vez de quedarte en un “voy a facturar más” lo que necesita tu negocio es un “voy facturar 500.000€” (o  100.000€ o 30.000€ ¡da igual!)

Porque sólo de esta manera podrás ir evaluando a lo largo del año a qué distancia estás de tu destino.

Del mismo  modo,  no es suficiente con “voy a lanzar un nuevo producto para fidelizar a mis clientes” sino  “voy a lanzar el producto X en el mes de junio para generar 50.000€ de nuevos ingresos”.

Es lo que en el mundo empresarial se define como Objetivos SMART.

Yo lo traduzco como: Específicos, Medibles, Activadores, Realistas y Temporalizados.

Porque tus objetivos, además de específicos – medibles – temporalizados, deben ser activadores y realistas.

Cuando digo Activadores me refiero a que supongan un cierto reto para ti, que te saquen de tu zona de confort. Porque será desde esta actitud desde la que alcanzarás un crecimiento significativo.

Pero cuidado, que soñar es gratis y a veces puedes pasarte de la raya.

Por eso también deben ser Realistas. Y para esto tienes que ser muy consciente de los recursos de que dispones: equipo en quien delegar, presupuesto para desarrollar tu estrategia, los propios tempos del mercado, tu estilo de vida y necesidad de conciliación, etc.

Algunos objetivos que habitualmente necesitamos definir hacen referencia a:

• Objetivos económicos (cuánto quieres factuar y/o ganar)
• Objetivos de negocio (posicionamiento de tu marca, desarrollo de productos, etc)
• Objetivos de marketing (crecimiento de audiencia, ratios conversión a ventas, etc)
• Objetivos de gestión (definición de procesos, gestión del equipo humano, etc)

Los”Indicadores” son como el GPS de tu viaje.

Cuando  ya sabemos cuál es el punto de partida y cuál es el destino, un objetivo medible (en cantidad, calidad y  tiempo) el siguiente paso es definir cuáles son lo hitos que te permitirán comprobar que vas por buen camino.

Es como ir haciendo paradas estratégicas en un viaje y comprobar sobre el mapa que seguimos en la ruta prevista.

Si te has perdido o desviado, buscarás cómo recalcular el rumbo ¿verdad?

Pues sólo si marcas previamente esos Indicadores en tu negocio, podrás detectar a tiempo qué tal vas y si tu estrategia necesita cambios.

Imaginemos que el producto que vas a lanzar es un curso (online o presencial).

Tus indicadores (hitos) podrían ser:

• Seleccionar el tema (después de investigar las necesidades de tu target)
• Definir los parámetros iniciales: duración, formato, nivel, etc
• Crear el índice y  temporalizar la creación de contenido
• Producción de cada uno de los bloques/lecciones del curso
• etc.

Crear una Hoja de Ruta, es un básico imprescindible

Llámale Hoja de Ruta, Plan de Acción, Plan Estratégico o lo que tú quieras.

Me refiero a ese documento en el que recoges de forma gráfica y visual todo tu plan de viaje (¡es lo más práctico!).

Puede ser un mapa mental, un diagrama de Gantt  o cualquier otro formato.

Porque para alcanzar tus objetivos, no es suficiente con Definirlos y desglosar Hitos.

Recuerda que hay que temporalizar. Pero además, cada uno de estos Hitos llevará implícitas diferentes Tareas, que también tendrás que desglosar en detalle.

En mi experiencia, es aquí donde la cosa de pone fea, por la pereza que puede darte. Porque estas listas de tareas son largas, largas, largas.

¿Cómo te aconsejo trabajar?

Si esto de la Planificación todavía es una asignatura pendiente para ti, lo que mejor me ha funcionado con mis clientes es aterrizar el calendario de Hitos y después, semana a semana, ponerte con a desmigar tareas.

Si en vez de semana a semana consigues hacerlo mensualmente, trabajarás todavía mejor, sobre todo si tienes equipo o colaboradores que también participan en un determinado proyecto. Así será más fácil que puedan manejar sus propios tempos y que no se produzcan retrasos que afecten a todo el proyecto.

Escoger la “maleta” para tu viaje, marcará la diferencia.

Cuando hablo de “maleta” me refiero al sistema de gestión que utilizas para tener siempre esos objetivos e hitos presentes, tanto tú como tu equipo.

He asistido muchas veces a la siguiente situación:

__  Buena definición de Objetivos e Indicadores.

__  Hoja de Ruta Estratégica para lograrlos

__  Trabajo diario basado en rutinas, apagar fuegos, asistir emergencias, etc

En definitiva, que no sirve de nada poner tus Objetivos sobre papel o diseñar una estrategia de marketing si después no la implementas, si no es la brújula diaria para programar la semana o para establecer prioridades.

Que ya sabes: la cabra tira al monte.

Y  si  te has acostumbrado a trabajar de cierta forma, lo más probable es que tarde o temprano vuelvas ahí.

¡A no ser que establezcas un nuevo sistema de trabajo!

¿Mi favorito?

Ahora mismo es Notion, una herramienta digital que combina múltiples funciones, como gestión de proyectos, bases de datos, tareas y mucho más.  ¡Todo mi negocio se gestiona desde ahí!

ALGUNOS TIPS PARA TENER ÉXITO

•  Mantén el FOCO. Ten siempre claro a dónde vas y qué quieres conseguir en cada una de las áreas en las que intervengas. El foco tiene que ver con la Misión y la Visión de tu negocio (medio-largo plazo), más allá de los objetivos puntuales.

• Organiza tu TIEMPO EMPRESARIAL. Habitualmente los emprendedores, profesionales liberales y/o micropymes encuentran mucha resistencia a “delegar”. No vamos a entrar aquí en detalles de por qué sucede esto pero si estás aquí, siendo hombre/mujer orquesta, es especialmente importante que tengas mucho esmero en ir definiendo nuevas rutinas como chequear constantemente tu cronograma y actualizar tu lista de tareas pendiente siendo fiel a las prioridades que marcaste.

• Establece un día al mes para RECOGER DATOS Y ANÁLIZAR cómo andas. Es decir, revisa qué dicen tus Indicadores y actúa en consecuencia. Corrige o celebra.

Ahora te toca a ti. 

¿Te planificas de forma muy distinta a lo que te he contado?
¿Hay alguna idea que te parezca especialmente interesante?